Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH)

Trastorno del espectro autista (TEA)
Qué es el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)
Signos y síntomas del TDAH
Por lo general, se piensa que el TDAH solo se diagnostica cuando un niño es muy hablador o no puede controlar su excitación o sus movimientos corporales. Sin embargo, un niño con TDAH también puede ser propenso a soñar despierto, olvidar o perder objetos, cometer errores por descuido o incluso correr riesgos innecesarios. El TDAH también puede manifestarse de una manera que dificulte que un niño resista la tentación o afecte el llevarse bien con los demás.
El CDC señala que un niño que tiene TDAH puede:
- soñar despierto mucho en lugar de concentrarse
- olvidar o perder cosas con frecuencia
- retorcerse o moverse incontrolablemente
- hablar demasiado en momentos inapropiados
- cometer errores por descuido o tomar riesgos innecesarios
- tener dificultades para resistir la tentación cuando se presenta
- tiene problemas para turnarse con otros niños
- tener dificultad para llevarse bien con los demás en la escuela o en la vida hogareña

Tipos de trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH)
Hay tres tipos de TDAH:
1. Predominantemente desatento. El TDAH predominantemente inatento se define cuando un niño tiene problemas para organizarse o mantenerse concentrado en una tarea. Esto también incluye prestar atención a los detalles o seguir instrucciones o conversaciones de padres, maestros u otras figuras de autoridad en su vida. A menudo se distraen fácilmente con interrupciones aparentemente menores, lo que hace que pierdan el enfoque en actividades más importantes como el trabajo escolar.
2. Predominantemente Hiperactivo-Impulsivo. El TDAH predominantemente hiperactivo-impulsivo se identifica cuando un niño se mueve inquieto y habla en exceso. Un niño con este tipo de TDAH también tendrá dificultades para quedarse quieto y estar en constante movimiento. Esto proviene de un sentimiento de inquietud constante que contribuye a las luchas con la impulsividad. También son propensos a interrumpir a los demás, agarrar cosas de las personas, hablar en momentos inapropiados o exhibir una incapacidad para esperar su turno en entornos grupales.
3. Presentación Combinada. El TDAH de presentación combinada es cuando un niño comparte los dos primeros tipos de síntomas del TDAH por igual.
El TDAH es aproximadamente el doble de común en hombres que en mujeres, pero las proporciones varían según el tipo. Los síntomas del TDAH también se presentan de manera diferente según el género del individuo afectado. Los hombres tienden a ser hiperactivos, lo que hace que los síntomas sean muy difíciles de pasar por alto.
Las mujeres, sin embargo, no muestran los mismos signos de hiperactividad con tanta frecuencia como los hombres. En cambio, se ven afectados con mayor frecuencia por la incapacidad para concentrarse, a menudo tratando de ocultarlo. Los padres generalmente identifican este problema cuando su hija dedica más tiempo a las tareas escolares básicas o pone excusas para evitar la escuela por completo.

Adultos con TDAH
Cómo se diagnostica y trata el TDAH
El diagnóstico de un niño con TDAH requiere varios pasos. No existe una prueba única para la afección, y otros problemas de desarrollo, médicos y de salud mental tienen síntomas similares. Por ejemplo, si un niño tiene dificultades para ver u oír, puede causar problemas para concentrarse en la escuela. El diagnóstico del TDAH generalmente incluye calificar los síntomas del TDAH y obtener un historial del niño de los padres, maestros y, en algunos casos, del niño.
Los síntomas deben estar presentes durante más de seis meses antes de los 12 años para diagnosticar el TDAH. Además, deben ser más pronunciados de lo esperado para el nivel de desarrollo del niño, ocurrir en al menos dos entornos (como el hogar y la escuela) e interferir con el funcionamiento normal del día a día.
En la mayoría de los casos, tratar el TDAH con terapia conductual y medicamentos es el plan más eficaz. Para los niños en edad preescolar (4-5 años de edad) con TDAH, el enfoque preferido es ayudar a los padres a aprender cómo modificar el comportamiento de sus hijos antes de recetar medicamentos. Los planes de tratamiento completos incluirán una estrecha vigilancia, seguimientos y ajustes, si es necesario, a lo largo del camino.
Los hábitos saludables impactan el TDAH
La investigación actual muestra que la genética juega un papel esencial en la comprensión de la(s) causa(s) del TDAH, que aún se desconoce en gran medida. Estudios recientes se centran en el papel de los neurotransmisores dopamina, noradrenalina y, más recientemente, serotonina. Otras causas posibles son lesión cerebral/traumatismo craneoencefálico, exposición a agentes ambientales (como el plomo) o alcohol/tabaco en el útero, parto prematuro o bajo peso al nacer.
Es importante tener en cuenta que la investigación no respalda la visión obsoleta de que el TDAH es causado por comer azúcar en exceso o ver demasiada televisión. Además, el TDAH no puede ser causado por técnicas de crianza o factores sociales y ambientales como la clase socioeconómica.
Sin embargo, los hábitos de vida saludables ayudan al niño a controlar los síntomas del TDAH. Desarrollar estos hábitos a una edad temprana puede reducir el impacto del TDAH. Estos hábitos incluyen una dieta nutritiva, 60 minutos de actividad física todos los días, tiempo de pantalla limitado y la cantidad recomendada de sueño.

